Jesús habló diciendo: Estén prevenidos, porque ustedes no saben qué día vendrá su Señor. Entiéndanlo bien: si el dueño de casa supiera a qué hora de la noche va a llegar el ladrón, velaría y no dejaría perforar las paredes de su casa. Ustedes también estén preparados, porque el Hijo del hombre vendrá a la hora menos pensada. ¿Cuál es, entonces, el servidor fiel y previsor, a quien el Señor ha puesto al frente de su personal, para distribuir el alimento en el momento oportuno? Feliz aquel servidor a quien su señor, al llegar, encuentre ocupado en este trabajo. Les aseguro que lo hará administrador de todos sus bienes. Pero si es un mal servidor que piensa: "Mi señor tardará”, y se dedica a golpear a sus compañeros, a comer y a beber con los borrachos, su señor llegará el día y la hora menos pensada, y lo castigará. Entonces él correrá la misma suerte que los hipócritas. Allí habrá llanto y rechinar de dientes. Palabra del Señor. ¿Qué me quieres deci...
Los cinco minutos del Espíritu Santo 1 de agosto " Ven Espíritu Santo. Me han dicho que soy como un diamante en bruto, una piedra preciosa que está llamada a resplandecer con toda su belleza. Pero para ofrecer todo mi brillo, necesito ser tallado, pulido, trabajado Ven Espíritu Santo. Ven a tallar este diamante que tú has creado, ven a sacar de mí todo lo bello que tú mismo me has regalado. De mi corazón pequeño saca los mejores actos de amor; de mis labios saca las mejores sonrisas y las mejores palabras; de mis ojos saca las miradas más buenas, comprensivas y pacientes; de mis manos saca las mejores acciones, las mejores caricias, los gestos más bellos. Ven Espíritu Santo, a realizar tu obra en mi vida. Amén. " 📚 Autor: Mons. Víctor Manuel Fernández. ® Editorial Claretiana.
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