SOLEMNIDAD DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO, REY DEL UNIVERSO

Lectura del segundo libro de Samuel 5, 1-3 Todas las tribus de Israel se presentaron a David en Hebrón y le dijeron: «¡Nosotros somos de tu misma sangre! Hace ya mucho tiempo, cuando aún teníamos como rey a Saúl, eras tú el que conducía a Israel. Y el Señor te ha dicho: "Tú apacentarás a mi pueblo Israel y tú serás el jefe de Israel"». Todos los ancianos de Israel se presentaron ante el rey en Hebrón. El rey estableció con ellos un pacto en Hebrón, delante del Señor, y ellos ungieron a David como rey de Israel. Palabra de Dios. Un rey que fuera pastor de su pueblo, que conociera a sus ovejas, que las condujera hacia pastos y fuentes tranquilas, que estuviera dispuesto a dar su vida por ellas, así es como quería Yahvé que fuera el rey de su pueblo Israel. El rey David no siempre cumplió los deseos y mandamientos de su Dios, pero de su estirpe nacería el verdadero rey de todos los pueblos, Jesucristo, que fue un verdadero rey pastor, el buen pastor que q...